miércoles, 31 de octubre de 2012

El Gobierno propone retrasar la edad minima de la jubilación anticipada Economía

El Gobierno prometió a la Unión Europea en julio que iba a retrasar la edad real de jubilación. Para lograrlo, se propone entre otras cosas elevar la edad mínima para acceder a la jubilación anticipada que desde enero estará entre los 61 y los 63 años y la de la jubilación parcial, según el informe que la Seguridad Social remitió ayer al Congreso y a los agentes sociales. No especifica qué edad pretende fijar ahora pero, en el citado documento, el Ejecutivo también afirma que su intención es aumentar el periodo mínimo de cotización para acceder a las diferentes modalidades que permiten a los trabajadores retirarse antes de cumplir la edad legal y los coeficientes de reducción que se aplican. Para acceder a retrasar el cumplimiento del objetivo de déficit 3% , Bruselas exigió a España que reformara de nuevo su sistema de pensiones cuando todavía no ha entrado en vigor el último gran cambio. A partir de enero de 2013 y hasta 2027, la edad legal de jubilación se irá elevando hasta pasar de los 65 años actuales hasta los 67. El objetivo de ambas reformas es retrasar la edad real de retiro, en 2011 en 63,5 años, según los datos del informe al que ha tenido acceso este diario. más informaciónLas empresas deben pagar ya el paro de los prejubilados El Gobierno recortará las pensiones por imposición de Bruselas El PP abarata las prejubilaciones de las grandes empresas Las empresas con ganancias pagarán más por prejubilar La propuesta del Gobierno al Pacto de Toledo ?la comisión parlamentaria que trata los temas de pensiones, en la que el Partido Popular cuenta con mayoría absoluta? para alcanzar este objetivo supone reformar el acceso a la jubilación anticipada, a la jubilación parcial y, según especifica en un segundo informe, hacer más fácil la compatibilidad entre continuar trabajando y percibir una pensión de jubilación. El contenido de ambos documentos fue estudiado por el Consejo de Ministros el pasado viernes. La reforma de pensiones que entrará en vigor en enero ?es de esperar, dado los tiempos parlamentarios, que la que ahora comienza a pergeñarse no se apruebe antes en el Congreso? contempla cuatro vías de acceso a la jubilación anticipada. Pero dos son las principales y las únicas que propone reformar el Gobierno. Una, que permite retirarse con 61 años, llega cuando el trabajador ha sido afectado por un despido colectivo o el cierre de alguna empresa. La otra, se abre a los 63 años de forma voluntaria. En ambos casos desde enero será necesario un periodo mínimo de 33 años de cotización ahora 30 y que se aplique un coeficiente reductor que va del 1,625% trimestral al 1,875%, en función de los años cotizados. La intención del Gobierno es que se actúe sobre los tres puntos: edad, años cotizados y coeficientes de reducción, según el informe, de 41 páginas. En una redacción casi imposible y ambigua, el informe habla de la ?adecuación? [vulgo, retraso] de la edad de la jubilación anticipada al retraso de la edad ordinaria, de ?la actualización [es decir, ampliación] del período mínimo de cotización exigido para acceder anticipadamente a la pensión de jubilación? y ?ajustar los coeficientes reductores de la cuantía de la pensión [...] por la pérdida de las correspondientes cotizaciones sociales?. También busca el Gobierno endurecer el acceso a la jubilación parcial. La ministra de Empleo, Fátima Báñez, explicó el pasado viernes que, según sus conclusiones, esta modalidad de retiro no cumple la función para la que se creó: el retiro parcial de un trabajador antes de la edad legal de jubilación y su sustitución por un joven. Como en el caso de la anticipada, en este punto la Seguridad Social también propone el retraso de la edad 61 años para acceder a ella de acuerdo a como lo haga la edad ordinaria y aumentar el periodo mínimo de cotización 25 años . El segundo informe persigue facilitar a los jubilados combinar el cobro de la pensión y que sigan trabajando. Justifica el Ejecutivo esta propuesta en que es una recomendación histórica del Pacto de Toledo y que, pese a ello, ?siempre ha contemplado una fuerte rigidez en el ámbito de la compatibilidad entre la percepción de la pensión de jubilación y la realización de un trabajo?. Entre los incentivos que se pretenden introducir, está la desaparición de ?la obligación de cotizar?.

Fuente de la Noticias: Noticias de España

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